
Es uno de los principales destinos turísticos debido a su belleza natural y su cultura ancestral de la etnia rapanui.

La leyenda dice que un nativo soño con un lugar lejano en busca de un hogar para el anteriormente nombrado rey.
La mayoría de la población que a día de hoy viven de la pesca y el turismo, antes vivían del cultivo. En el litoral hacían centros religiosos en donde rendían culto a los moais.

Con el tiempo la población creció y se empezaron a talar arboles para la agricultura, construcción de balsas y moais. Debido a una sobrepoblación se vieron obligados a abandonar los poblados ¡Habían destruido su propio medio ambiente!
Es un destino más bien para gente que le guste el turismo, aunque también se puede disfrutar de sus playas casi vacías y meditar sobre uno de los lugares más misteriosos de la Tierra.

¡Espero que os haya gustado, hasta el siguiente post!
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